04-12-1997
La imaginación según nos comenta el maestro Simón Rodríguez, "Es buena en poesía, pero en asuntos de transcendencia. , es por lo menos embarazosa". Esto ocurre al momento de reflexionar, de meditar y de desear expresar en un discurso, todas las emociones que se elevan dentro para ser presentadas ante todos ustedes en este día, donde el Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela se engalana para celebrar el acto de imposición de medallas a 152 nuevos Odontólogos egresados de la Facultad de Odontología; profesionales jóvenes, son ímpetu y energía innovadora para hacer crecer los conocimientos adquiridos en nuestra Universidad; la que sufrago nuestros estudios, sin mezquindades, sin restricciones, siempre abierta para brindarnos su sabiduría y prepararnos para enfrentar el futuro; con ética, con mística y con honestidad, como generación de relevo dispuesta a luchar por nuestra profesión, por nuestro país y con ello por nuestra casa de estudios, nuestra querida Universidad Central de Venezuela, que está aquí, presente, fuerte y firme ante todas las dificultades, dispuestas a vencerlas; con la ayuda de sus estudiantes que están dentro, de sus egresados que están fuera y de todo su cuerpo de profesores que creemos en ella.
En éste día se agolpan en mi pecho recuerdos y emociones ya vividas que se acrecientan aun más al tener dentro de mis ahijados a Claudia, hija de mi padrino de promoción Dr. Armando Nieves; el destino nos une en lazos fraternos. Igual satisfacción me embarga al contar dentro de este grupo de ahijados con 26- Graduandos hijos, sobrinos y nietos de igual número de profesores de nuestra Facultad y de Facultades hermanas; así mismo todos y cada uno de Uds. ; queridos ahijados; han marcado en mi una profunda huella, desde el mismo día que me comunicaron su decisión de darme la mención de Madrina, sentí una gran alegría y satisfacción por el honor que me conferían, por el homenaje rendido a mi corta labor docente; desde allí comenzó una nueva etapa de mi vida en este transitar; procurando superarme cada día para enorgullecerlos; en el comienzo no los conocía a todos y me propuse ese acercamiento a todos y cada uno de ustedes; para manifestarles mi afecto; mi amistad y mi apoyo incondicional; hoy siento que hemos formado una gran familia.
Comparte conmigo este honor de apadrinarlos, el profesor Gustavo Hernández Rizzo; luchador, emprendedor, a quien dedico mis palabras de gratitud por el apoyo que me brindara en todo momento con las exigencias de la promoción ya que al estar cursando mis estudios de 4to nivel muchas veces me impidió dedicarles el 100% a ustedes y a sus necesidades.
Hoy cada uno de ustedes culmina una etapa vital de su vida estudiantil, superando todos los obstáculos de ese proceso, recibiendo el galardón a su afán, a su dedicación y en su perseverancia; dentro de los muros de la Facultad disfrutaron momentos gratos de fraternidad, hermandad y leal amistad; los invito a conservarla, a defenderla y protegerla. Si bien es cierto que cada uno de ustedes tuvo sus dificultades particulares, no es menos cierto que su mérito es haberlas superado, por ello los felicito y le auguro éxito profesional, sin deseos de lucro, continúen enriqueciendo su formación a través del auto estudio y de los estudios de 4to nivel que nos ofrece nuestra Facultad, ello los hará crecer cada vez más como profesionales y como seres humanos.
En está inolvidable ocasión, merezcan especial mención de agradecimientos todos mi compañeros docentes de la Facultad de Odontología, quienes en la satisfacción del deber cumplido comparten conmigo este momento; así mismo a mis compañeros de la Cátedra de Periodoncia, a mis compañeros del Postgrado, al personal administrativo, a mi amigas Maite, Mariluz y Cecilia a quien muy particularmente agradezco todas las gestiones realizadas para culminar con entusiasmo y alegría éste momento acto. A todos mil gracias.
Es oportuno este momento para agradecer también muy particularmente a mis padres, por mi propia vida, por la formación que me confieran, por su dedicación y amor; junto con ellos felicitar muy efusivamente a sus padres, por que este triunfo, también les pertenece, todos y cada uno de ellos, principio de nosotros mismos, les han legado el más valioso elemento de su vida, la mejor de las herencias. su profesión , junto a ellos compartimos hoy esta satisfacción y orgullo.
No puedo dejar pasar una especial mención a mi esposo Raúl; a mi hijos Adriana y Alejandro; quienes comparten conmigo este feliz momento, gracias por el apoyo que siempre me han dispensado.
DIOS, protagonista principal de todo lo que nos rodea, ha permitido que hoy padres, padrinos, graduandos, docentes, esposos y esposas, familiares y amigos, luzcamos las mejores galas para festejar este día; a él doy infinitas gracias por cada minuto vivido y pido que los bendiga hoy, mañana y siempre.
GRACIAS.