Página de Microbiología

• Guilarte, C. Profesor Agregado. Facultad de Odontología. UCV.
  
  
• Pardi, G. Profesor Asociado. Jefe de la Cátedra de Microbiología. Facultad de Odontología. UCV.
  
  
• Céspedes, C. Odontólogo, UCV (Ex Preparadora de la Cátedra de Microbiología).

La introducción de las técnicas de biología molecular en los estudios microbiológicos ha traído como consecuencia cambios en la taxonomía y nomenclatura bacteriana, así como también, la identificación de nuevas especies bacterianas, incluyendo algunas que anteriormente no podían ser cultivadas. Las especies de bacilos anaerobios Gram negativos relacionados con la etiología de infecciones endógenas de la cavidad bucal, ha sido objeto en los últimos 20 años de numerosas reclasificaciones taxonómicas, por lo que han surgido nuevos Géneros y especies taxonómicas. Por tales razones, el propósito de esta revisión es actualizar los cambios taxonómicos ocurridos en los últimos años, en el grupo de bacilos anaerobios Gram negativos de interés en cavidad bucal.

En 1989, Shah y Collins(1) propusieron el Género Bacteroides, para agrupar a la mayoría de bacilos anaerobios estrictos Gram negativos. Para finales de los 80s y principio de los 90s, las especies de Bacteroides fueron reorganizadas taxonómicamente a otros Géneros (Tabla 1).

Las especies de bacilos anaerobios estrictos asacaroliticas, anteriormente conocidas como Bacteroides gingivalis, Bacteroides asaccharolyticus, y Bacteroides endodontalis fueron reclasificadas en un nuevo Género, conocido hoy día formalmente como Porphyromonas (2). Actualmente el Género Porphyromonas comprende doce especies, pero solo se han aislado de la cavidad bucal del hombre, P. gingivalis, P. endodontalis y P. catoniae (anteriormente Oribaculum catoniae). De estas especies, P. gingivalis, ha sido considerada una bacteria periodontopatógena por excelencia, se aísla del surco gingival especialmente cuando no existe buena salud periodontal, y se ha asociado especialmente con la progresión de la periodontitis crónica, y, P. endodontalis, ha sido aislada con cierta frecuencia en los conductos radiculares infectados y se ha encontrado en estudios recientes con relativa frecuencia en pacientes VIH positivos (3,4)

Posteriormente, Bacteroides melaninogenicus y especies de bacilos anaerobios estrictos sacarolíticas pigmentadas pertenecientes al Genero Bacteroides y otras especies no pigmentadas, fueron reclasificadas dentro del Genero Prevotella (5). Actualmente este Género se divide en dos grupos: Especies pigmentadas, entre las que se encuentra: P. intermedia, P. nigrescens, P. loeschii, P. corporis, P. melaninogenica, P. denticola, P. pallens, y especies no pigmentadas, tales como: P. buccae, P. oralis, P. oris, P. oulora, P. veroralis, P. tannerae, P. enoeca, P. dentalis (anteriormente Mitsuoella dentalis) (3,6). Cabe resaltar que P. intermedia y P. nigrescens son fenotípicamente idénticas, sin embargo estudios moleculares han confirmado la existencia de dos especies distintas genotípicamente diferenciadas, por lo que se consideró que P. nigrescens, es una nueva especie derivada de una cepa de P. intermedia (7). De estas especies, P. intermedia, P. nigrescens, P. denticola, P. loeschii, P. melaninogenica han sido comúnmente aisladas y detectadas en enfermedad periodontal, infecciones endodonticas y abscesos dentoalveolares (3,4). La significación patógena de las otras especies no es bien conocida, por lo que se relacionan con infecciones en cavidad bucal unidas a otras bacterias, de carácter sinérgico y polimicrobiano (3).

Han ocurrido varios cambios taxonómicos en otras especies sacaroliticas no pigmentadas conocidas como Bacteroides capillosus, Bacteroides pneumocintes y Bacteroides forsythus, que frecuentemente habitan el surco gingival. B. pneumocintes fue reclasificado como Dialister pneumocintes (8) y B. forsythus ha sido reclasificado como Tannerella forsythensis (9). B. capillosus sigue perteneciendo al Genero Bacteroides, pero su situación taxonómica es incierta, y aún se espera por su reclasificación (8). De estas especies T. forsythensis se ha asociado frecuentemente con periodontitis y también se ha detectado en conductos radiculares infectados mediante métodos moleculares al igual que D. pneumocintes (3,8).

Otro grupo de bacilos anaerobios estrictos lo constituyen las especies que integran el Género Fusobacterium, entre ellas las más comunes son: F. nucleatum, F. periodonticum, F. alocis y F. sulci (10). Estas especies habitan en el surco gingival y han sido relacionadas con la enfermedad periodontal, sin embargo, su significación como patógenos es dudosa, a excepción de F. nucleatum, de la cual se han descrito hasta los momentos cinco subespecies: F. nucleatum nucleatum, F. nucleatum polymorphum, F. nucleatum fusiforme, F. nucleatum vincentii y F. nucleatum animalis (3,11). De ellas, F. nucleatum subsp. nucleatum, se aísla principalmente de sacos periodontales y en infecciones de la pulpa dental mientras que F. nucleatum subsp. polymorphum es comúnmente aislado del fluido crevicular gingival y en abscesos agudos de origen endodontico (3,4), F. periodonticum se ha encontrado principalmente en gingivitis ulcerativa y abscesos dentoalveolares. F. alocis ha sido reclasificado como Filifactor alocis (12) y se ha aislado en fluido crevicular gingival, ocasionalmente en infecciones de la pulpa dental por métodos de cultivos y recientemente en casos de infecciones endodonticas por métodos moleculares. Estas especies de Fusobacterium tienen la capacidad de coagregarse con la mayoría de las bacterias de la cavidad bucal, por lo tanto se consideran microorganismos importantes como puentes de unión en la etapa de colonización durante la formación de la placa dental (3,4).

La única especie del Género Leptotrichia en Cavidad bucal es L. buccalis, que se incluye dentro de las bacterias que disminuyen el pH de la placa dental, por lo cual se le asocia con caries radicular y también ha sido asociada con enfermedades periodontales necrosantes (3,4). Varias especies del Género Wolinella, han sido reclasificadas al Género Campylobacter, quedando solamente dentro de este Género la especie W. succinogenes que ha sido asociada con periodontitis crónicas e infecciones pulpares y periapicales (13). Del Género Selenomonas, S. sputigena, es la principal especie del grupo, que habita en el surco gingival y se ha aislado de pulpa dental necrótica, así como de otras infecciones intrabucales, a pesar que no se ha demostrado su patogénesis en las mismas (3, 4, 14).

En cuanto a los bacilos anaerobios facultativos Gram Negativos (Tabla 2), los cambios taxonómicos ocurridos corresponden mayormente al Genero Campylobacter. Se han reconocido varias especies de Campylobacter, de interés en cavidad bucal, C. concisus, C. showae, C. sputorum, en adición, las especies Wolinella recta, Wolinella curva y Bacteroides gracilis (4,13) han sido reclasificadas, dentro de este Género, como C. rectus, C. curvus y C. gracilis respectivamente. Estas especies no siempre son fáciles de identificar por métodos convencionales de cultivo, sin embargo, se han relacionado con gingivitis, infecciones en conductos radiculares, abscesos dentoalveolares, progresión de la enfermedad periodontal. C. rectus ha sido aislado de sitios con enfermedad periodontal activa especialmente en pacientes inmunocomprometidos y parece ser la especie con mayor significación patógena de este grupo.

Actinobacillus actinomycetemcomitans, es una de las especies de mayor importancia en cavidad bucal, implicada particularmente en formas agresivas de enfermedad periodontal en adolescentes (periodontitis juvenil localizada), por lo que se le considera una bacteria periodonpatogenica. También es considerado un patógeno oportunista aislado de casos de endocarditis infecciosa, osteomielitis y abscesos cerebrales (3,4).

En relación con Capnocytophaga (antes clasificado como Bacteroides ochraceus), las especies de este Género se les considera como patógenos oportunistas y bacterias periodontópatogenas, asociadas a otras bacterias, encargadas de crear las condiciones ideales en el tejido periodontal para que actúen P. gingivalis y A. actinomycetemcomitans, y han sido aisladas en un gran número de infecciones en pacientes inmunocomprometidos (3,4).

Haemophilus son bacterias que se caracterizan por ser bacilos anaerobios facultativos. De las especies de este Género, H.parahaemolyticus ha sido aislado de infecciones de tejido blando de la cavidad bucal. Sin embargo, este microorganismo no forma parte de la flora normal de la cavidad bucal, también ha sido aislado de infecciones mandibulares y casos de endocarditis infecciosa. H. influenzae, aunque forma parte de la microbiota normal de la rinofaringe se ha aislado de saliva y se encuentra asociada a procesos infecciosos como epiglotitis, meningitis, neumonías y endocarditis infecciosa (3,4).

Otras especies de bacilos Gram negativos descritas en la literatura incluyen: Johnsonii ignava, Cantonella morbi, las cuales han sido asociadas con gingivitis y periodontitis respectivamente (8) y Helicobacter pylori donde se ha detectado en muestras de placa dental, por lo cual la cavidad bucal es considerada un reservorio importante para la bacteria y representar un factor de riesgo para reinfección gastrointestinal (15).