Franco, D.; Arteaga C.; Martínez M.
Resumen: La UNICEF plantea que la leche materna es el mejor alimento que puede recibir todo infante de forma exclusiva durante sus primeros seis meses de vida y complementaria hasta los dos años, ya que contiene la cantidad de nutrientes necesarios para su crecimiento y desarrollo. De igual forma existen planteamientos que avalan su importancia en cuanto al desarrollo cráneo facial, así como en la respiración, fonación, deglución y masticación; influyendo significativamente en un adecuado desarrollo de los maxilares, lo cual tiene estrecha relación con la prevención de maloclusiones. Ya que en el proceso del crecimiento y desarrollo máxilo-facial, los factores genéticos conjuntamente con los ambientales como: succión y alimentación, condicionarán la forma de disponerse las arcadas dentarias a través de la musculatura. En la succión, a través de la lactancia materna se produce un movimiento posteroanterior de avance de la mandíbula que favorece la morfogénesis de la articulación témporo mandibular (ATM) por lo que se denomina "primer avance fisiológico de la oclusión". Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las maloclusiones ocupan el tercer lugar de prevalencia dentro de las patologías en salud bucodental, luego de la caries y de la enfermedad periodontal. Por lo que representa actualmente un reto, la interrelación de los diferentes profesionales del área para lograr mayor difusión a la población y su impacto en cuanto a prevención y promoción de salud.