Tal como lo vaticinamos en nuestro editorial anterior la economía mundial ha caído en picada a una velocidad vertiginosa a todos los niveles se comentan las afecciones económicas y las medidas desesperadas para evitar que se terminen de derrumbar las potencias económicas que mueven las empresas generadoras de empleo y bienes de servicios en el mundo entero, recortes presupuestarios e inyecciones de capitales van y vienen tanto en Europa como en Asia y América, los grandes tambalean y los pequeños tiemblan.
Ya lo comentábamos en el editorial del número anterior, es un ciclo histórico que inefablemente se cumple, vendrán crisis, empresas que cierren sus puertas, fusiones, alianzas y luego regresará la calma, ¿Cuánto tiempo durara este ciclo? Nadie lo sabe dependerá de los aciertos y de las políticas económicas de las grandes empresas y de los países donde ellas residan, mientras tanto en el mundo de las publicaciones veremos caer a mas de una publicación periódica o las veremos transformarse en publicaciones electrónicas si no desean desaparecer, los costos de impresión son cada día mayores y las empresas financiadores que mantienen con sus aportes a las revistas se ven obligadas a disminuir sus presupuestos para estos menesteres, solo los subsidios de los organismos interesados en mantener y promover la difusión de la producción intelectual en sus senos podrán servir de apoyo para mantenerlas.
Solo queda esperar que no se le ocurra a algún sabio pensar que debe reducirse el presupuesto a la cultura y la enseñanza, porque eso sería retroceder a los preceptos de la edad media, "mantén al pueblo en la ignorancia y lo dominaras".